¿Alguna vez has visto algo anormal en alguna carretera? Acontecimientos extraños e inusuales nos pueden acechar en algunas de las carreteras de México. Apariciones que pueden parecer atractivas para muchos hombres. Si eres una persona que circula por la carretera que va de la Ciudad de México a Cuernavaca toma precauciones o evita el uso de esa carretera.

Se cuenta  que en esta carretera se puede observar un carro color rojo. En dicho auto viajan un grupo de mujeres, las cuales tienen una gran belleza y muy bellos atributos, son de esas mujeres que todo varón desearía tener a su lado.  Se dice que estas bellas damas traen la fiesta en el auto, pues siempre van gritando de alegría, sonriendo y bailando.

Estas mujeres circulan  a gran velocidad por esta carretera. Hay personas que afirman haber visto a dos bellas mujeres, pero también hay otras que dice haber visto a tres, y otras cuentan que han tenido la “fortuna” de haber visto hasta cinco espectaculares mujeres en el carro rojo.

Sólo los varones pueden toparse con este carro rojo. Las mujeres circulan despertando pasiones y tentaciones mostrándoles sus atributos y proponiendo cosas que difícilmente un hombre rechazaría.  De ésta forma cuando el hombre está perdido en sus encantos, las mujeres lo invitan a subir de todas las maneras posibles, con gestos, cariños, platicas excitantes, coqueteos y finalmente mostrándole alguna parte de su escultural cuerpo. De esta forma la victima sabrá que se perderá de mucho si no se atreve a subir al carro rojo.

Poco después de que esto suceda, al costado de la misma carretera, se encuentran cuerpos sin vida. Cuerpos que parecieran haber sido utilizados para alguna especie de ritual, pues a lo largo de la piel de las víctimas se observan símbolos y marcas de alguna ceremonia, en la cual se les ha torturado como animales sacrificados para un aquelarre.

Los lugareños de la zona aseguran que el color rojo escarlata que cubre el auto se debe a los hombres que han sido víctimas de estas mujeres, ya que está fabricado con su sangre. Con el tiempo se dice que el carro de las brujas ha sido visto de manera menos constante.

Si recibes una invitación similar mientras circulas por esta carretera ten mucho cuidado y no subas al carro de las brujas. Tú podrías ser la próxima víctima.